jueves, 30 de abril de 2015

Florencia

El tren nos llevó hasta Firenze donde estuvimos dos días que fueron suficientes para recorrerla.
Se destaca la Catedral, Basílica di Santa María del Fiore y su Campanile y el Baptisterio que ocupan un mismo predio.




El Palacio de los Uffizi  guarda entre otras obras el David, de Miguel Ángel, mientras que para los que no pagamos para entrar a verlo hay una réplica en la Piazza de la Signoría, frente al Palazzo Vecchio en el que se erige  una torre que sirve de símbolo representativo de la ciudad en muchas reproducciones de promoción.





El Ponte Vecchio es también un lugar de cita obligada. Si bien el Río Arno es atravesado por muchos puentes en la ciudad, el Vecchio es diferente; tiene locales comerciales a ambos lados del único pasaje central que se especializan en joyas de oro y plata, además de los clásicos que venden souvenirs de todo tipo.




Preparamos en casa un candado con nuestras iniciales que  amarramos en una reja que sirve de cerco a un monumento en el centro del Ponte Vecchio donde también es tradicional ese rito. Nuestro candado quedó en Florencia junto con otros cientos, esperando quizás que volvamos otra vez a verlo.